¿CÓMO FUNCIONA?

La plata coloidal inactiva las enzimas de todas las células de los virus, parásitos, hongos y bacterias que estas usan para su metabolismo del oxígeno.
Es decir inactiva rápidamente el pulmón químico de estos generándoles asfixia.
La plata coloidal destruye microorganismos patógenos sin que estos generen una resistencia (caso contrario a los antibióticos)

Desde principios del siglo XX se sabe que ninguna bacteria, virus, hongo, levadura o microbio puede vivir en un líquido en el que haya una sola partícula de plata. Dicho metal los aniquila al contacto en solo minutos.
De ahí que la plata coloidal se considera uno de los más potentes y eficaces germicidas naturales, siendo este el principal antibiótico utilizado por los médicos antes de la llegada de la penicilina.

Por tanto, la plata coloidal funciona como un catalizador ya que su sola presencia hace que muchos microorganismos causantes de enfermedades infecciosas no puedan respirar y mueran asfixiados. Y lo hace con centenares de gérmenes.
Entre ellos, como demostró en 1988 el doctor Larry C. Ford (investigador de la Escuela de Medicina de la UCLA, EEUU), los streptococcus pyogenes (infecciones de la piel, impétigo, laringitis, fiebre escarlata, etc.), streptococcus pneumoniae (neumonía, meningitis, sinusitis, otitis media, infección de oídos), streptococcus faecalis (infecciones urinarias, endocarditis, heridas infectadas, etc.), streptococcus mutans (una de principales causantes de placa dental y caries), streptococcus gordonii (caries, endocarditis infecciosa, inflamación del corazón), staphylococcus aureus (neumonía, infecciones oculares, infecciones de la piel, furúnculos, impétigo, celulitis, heridas postoperatorias, meningitis, intoxicación alimentaria, osteomielitis, etc.), escherichia coli (intoxicación alimentaria, infecciones urinarias, diarrea del viajante, diarrea en niños, infecciones respiratorias y heridas infectadas), haemophilus influenzae (otitis media, infección de oídos, neumonía, meningitis, sinusitis, infecciones de garganta, artritis supurativa en niños), enterobacter aerogenes (heridas infectadas, infecciones urinarias, bacteriemia y meningitis), klebsiella pneumoniae (infecciones del aparato respiratorio, infecciones hospitalarias, infecciones de las vías urinarias, heridas infectadas y bacteriemia), pseudomonas aeruginosa (infecciones de heridas y quemaduras, queratitis, neumonía, meningitis, infecciones hospitalarias, infecciones urinarias, etc.), neisseria gonorrea, garnerella vaginalis, salmonella typhi y otros microbios patógenos entéricos como candida albicans, candida globata y malassezia furfur por citar sólo algunos.